sábado, 24 de septiembre de 2016

PRINCIPIO II DE STOTT PILATES: COLOCACIÓN DE LA PELVIS

La salud de la parte baja de la espalda (zona lumbar) depende en gran medida de la estabilización de la pelvis o cadera, y los músculos abdominales, transverso y oblicuos son los principales responsables de esa estabilización, de tal manera que si se logra mantenerlos activos se podrán realizar gestos repetidos sin lesionarse.
Stott pilates enfatiza en la estabilización de la pelvis y de la columna lumbar, durante la práctica de pilates, bien sea en la posición neutral o imprint como veremos más adelante.
POSICIONES DE LA PELVIS
A continuación vamos a ver las distintas posiciones que puede tomar la pelvis en el plano sagital y con respecto a la columna lumbar. Es importante comprender e interiorizar estos conceptos ya que nos va a permitir un trabajo más seguro y eficiente en nuestra práctica.
PELVIS NEUTRA. Según Kendall la posición de la pelvis neutra es cuando las Espinas Iliacas Antero Superiores (EIAS, huesos anteriores de la pelvis) están en el mismo plano entre sí y a la vez en el mismo que la sínfisis del pubis. (Plano horizontal y paralelo a la colchoneta si estamos tumbados y perpendicular a la colchoneta si estamos de pie). Esta posición tiene como consecuencia que se mantenga la curvatura normal de la columna lumbar.
RETROVERSIÓN o basculación posterior. Si el hueso púbico está más alto tendrá como resultado una inclinación pélvica posterior. Arrastra a la columna lumbar a un aplanamiento o rectificación de su curva normal. Es el producido cuando intentamos meter culo

ANTEVERSIÓN o basculación anterior. Si el hueso púbico queda más abajo que las EIAS tendrá como resultado una inclinación pélvica anterior. Arrastra a la columna lumbar a na hiperlordosis o aumento de la curvatura normal. Es el producido cuando intentamos sacar culo.

POR QUÉ PELVIS NEUTRA
Podemos definir el término de Pelvis neutra, como la posición anatómica ideal para la pelvis con respecto a la columna lumbar. Esta posición asegura una buena superficie de contacto entre los cuerpos vertebrales contiguos a través del disco intervertebral y como consecuencia un reparto homogéneo de la carga a través de toda la superficie.
La pelvis y columna neutra se considera la posición más segura, estable y eficiente para absorber cualquier impacto físico sobre las mismas y es la posición en la que como tal se respeta la curvatura lumbar normal de la columna.
Por lo tanto ésta será la postura más ideal y la que buscamos mediante la práctica de pilates
PELVIS EN IMPRINT
La posición de pelvis en imprint es una posición de seguridad para nuestra columna lumbar y es el equivalente a la posición de retroversión, es decir una colocación imprint significa una inclinación o basculación pélvica ligeramente posterior con una ligera flexión lumbar
La curvatura normal de la columna lumbar se alarga hacia la flexión al contraer los músculos oblicuos, y el recto abdominal en menor medida, para acercar la pelvis a la caja torácica anteriormente, disminuyendo por tanto el hueco que existe entre la pelvis y las costillas.
Al estar en la posición de imprint, la pelvis no debe estar tan inclinada posteriormente que el sacro pierda el contacto con la colchoneta. Tampoco es necesario presionar completamente la parte inferior de la espalda contra la colchoneta, mediante la activación del glúteo mayor.
El grado de contacto entre la columna lumbar y la colchoneta variará dependiendo de la persona
OTROS ASPECTOS A TENER EN CUENTA
Una alineación neutral no debe ser lograda arqueando la espalda de manera forzada, sino permitiendo que el peso del sacro descanse sobre la colchoneta y alargando la columna lumbar y la cara posterior de la pelvis
Mientras esta respirando y contrayendo los abdominales en esta posición, no debe sentir ninguna tensión en los extensores de la columna de la región lumbar. Si siente tensión muscular, mueve la pelvis ligeramente hacia la posición de imprint
Es más importante que la pared abdominal esté contraída y que la región lumbar no esté en tensión a que EIAS y la sínfisis púbica reposen sobre el mismo plano horizontal. Por ejemplo, alguien con el músculo glúteo prominente puede de hecho crear una lordosis exagerada en la columna lumbar intentado que las EIAS y la sínfisis púbica reposen sobre el mismo plano horizontal
Cuando describimos la posición y el movimiento de la pelvis, nosotros utilizamos el término neutral para referirnos a la columna o la pelvis que esta neutral en el plano sagital, es decir, con la columna lumbar en posición normal y sin ninguna flexión o extensión a través de la columna lumbar.
A veces podemos estar inclinado la pelvis lateralmente o flexionando lateralmente o rotando la columna, pero aun así nos referimos a la columna o a la pelvis como en posición neutral con tal de que estén en posición neutral en el plano sagital
CÓMO IDENTIFICO LA POSICIÓN NEUTRAL
En una colocación neutral, la curva normal, ligeramente convexa anteriormente, de la columna lumbar está presente.
Cuando está tumbado boca arriba el triangulo formado por las EIAS y la sínfisis púbica debe reposar paralelo a la colchoneta
La mejor manera para comprobar esta neutralidad es colocar las manos en forma de diamante en la zona baja del abdomen de manera que los talones de las mismas descansen sobre las EIAS (espinas iliacas anterosuperiores) y los dedos sobre el pubis. Para saber si la cadera está colocada en posición neutra hay que conseguir que el triángulo formado por las EIAS y la sínfisis púbica, quede paralelo al suelo si se está tumbado, y perpendicular si se está sentado o de pie.
Para interiorizarlo mejor, imagina que tienes un cuenco o vaso de agua sobre el abdomen como vemos en la foto de abajo:

PELVIS NEUTRA. El cuenco debe estar plano, bien estable y el agua no se derrama.
RETROVERSIÓN. El agua se vierte hacia tu cuerpo
ANTEVERSIÓN. El agua se vierte hacia tus piernas.
PELVIS EN NEUTRAL O EN IMPRINT
-Una posición imprint debe ser utilizada para asegurar la estabilidad de la pelvis si en una alineación neutral, ésta no puede ser estabilizada. Esto ocurre con frecuencia cuando hay ciertas tendencias posturales (por ejemplo hiperlordosis o cifosis-lordosis)
-Cuando hay debilidad en los oblicuos el ponerlos en esta posición ligeramente acortada les ayudara a mantenerse contraídos, dándonos estabilidad y evitando la extensión de la columna lumbar.
-Cuando los dos pies están levantados, lo que se llama, en una cadena cinética abierta, debemos de utilizar imprint, al principio sobre todo.
-Cuando ambos pies o un pie reposa firmemente sobre la colchoneta u otro equipamiento, lo que se denomina, en una cadena cinética cerrada, la pelvis y la columna están pueden estar estabilizados en posición neutral, por lo que utilizaremos esa posición.
-Una vez que se ha desarrollado suficiente fuerza en los abdominales para poder estabilizar en cadena cinética abierta (pies levantados), entonces se puede mantener una colocación neutral en esa posición.
LO QUE NUNCA DEBE DE HACER
-Permitir que la zona lumbar aumente su curvatura normal, es decir debemos evitar siempre que la pelvis se nos vaya a anterversión y por lo tanto mantenerla en neutral o imprint según las especificaciones concretas
-Activar el glúteo mayor o despegar el sacro de la colchoneta para pasar a la posición de imprint desde neutral.
EJERCICIOS PARA APRENDER EL PRINCIPIO DE LA COLOCACIÓN PÉLVICA
EJERCICIO 1. Tumbado boca arriba, la pelvis y la columna en posición neutral. Rodillas flexionadas y abducidas separados a la anchura de las caderas sobre la colchoneta. Los brazos alargados a los lados, las palmas hacia abajo.
INSPIRA. Mantén la alineación neutral, suelo pélvico y transverso activos
ESPIRA. Contrae los abdominales oblicuos y lleva la pelvis a posición de imprint mediante una ligera flexión de la columna lumbar.
INSPIRA. Mantén la posición de imprint.
ESPIRA. Vuelve a neutral
Completa varias repeticiones
Recuerda que para ir a la posición de imprint no debes de activar los glúteos. Lo que hacemos es acortar la distancia entre la pelvis y las costillas mediante la activación de los músculos abdominales oblicuos como vemos en la siguiente IMAGEN.

EJERCICIO 2. Mecer la pelvis empezando con la misma posición inicial que el ejercicio 1.
INSPIRA. Mantén la alineación neutral, suelo pélvico y transverso activos
ESPIRA. Contrae los abdominales oblicuos y lleva la pelvis a posición de imprint mediante una ligera flexión de la columna lumbar.
INSPIRA. Vuelvo a neutral.
ESPIRA. Llevo la pelvis a anteversión con la ayuda de los extensores lumbares
INSPIRA. Vuelvo a neutral.
Completa varias repeticiones
Recuerda como imagen que llevar la pelvis a la posición de imprint es como meter culo y llevarla a anteversión es como sacar el culo. Este mismo ejercicio le podemos realizar tanto de pie, de rodillas o en cuadrupedia.
EJERCICIO 3. Deslizar las piernas. Mantengo la posición inicial que en el ejercicio 1 pero con la pelvis en imprint.
INSPIRA. Mantén la posición imprint y desliza un pie por la colchoneta tan lejos como sea posible, estirando la pierna y manteniendo la estabilidad pélvica, es decir inmóvil.
ESPIRA. Vuelve a la posición inicial.
Completa varias repeticiones con una pierna y luego las mismas con la otra pierna. A medida que avanzas en el entrenamiento este ejercicio le realizarás en neutral.
Puedes comprobar la estabilidad pélvica colocando ambos dedos sobre las espinas EIAS como vemos en la siguiente IMAGEN, manteniéndolos inmóviles durante todo el ejercicio.

EJERCICIO 4. Levantar una pierna. Mantengo la posición inicial que en el ejercicio 1 pero con la pelvis en imprint.
INSPIRA. Mantén la posición imprint.
ESPIRA. Levanta una pierna de la colchoneta manteniendo la posición de imprint.
INSPIRA. Vuele el pie a la colchoneta.
Repite con la otra pierna y completa varias repeticiones. Después, levanta una pierna, mantén la posición y levanta la otra pierna, como vemos en la siguiente IMAGEN, para después bajarlas una a una. A medida que avanzas en el entrenamiento este ejercicio le realizarás en neutral.
En este ejercicio lo que debemos de fijarnos es que cuando levantamos la segunda pierna no nos salten los abdominales hacia fuera (proyección del ombligo hacia el techo), ni aumente la curvatura lumbar (pelvis a anteversión). Una apariencia plana del abdomen y una pelvis estable como resultado de la activación de nuestros abdominales más profundos, transverso y oblicuos.





sábado, 17 de septiembre de 2016

PRINCIPIO I DE STOTT PILATES. RESPIRACIÓN

Mediante la descripción de este principio vamos a aprender como debemos respirar durante la práctica de pilates. Respirar correctamente y acompañando los distintos movimientos que conlleva un ejercicio, es importante porque nos facilita la ejecución de los mismos y le da orden, además de que nos proporciona una mayor oxigenación a los músculos y órganos
CÓMO DEBE DE SER LA RESPIRACIÓN
Ésta debe de ser lenta, fluida, constante y controlada.
Si alguna posición te impide respirar con naturalidad es que no estás relajado. Disminuye la tensión, haz los movimientos más pequeños, con más control y menos fuerza, para que puedas respirar bien durante los ejercicios.
Con la práctica irás acompasando la amplitud de la respiración con la ejecución de los ejercicios
TIPOS DE RESPIRACIÓN
Existen tres tipos de respiración: clavicular, abdominal o diafragmática y torácica o lateral.
Respiración clavicular. Esta tipo de respiración sólo involucra la parte superior de la caja torácica y conlleva a un uso excesivo de los músculos respiratorios accesorios, creando tensión en el área del cuello y parte alta de la espalda.
Respiración diafragmática o abdominal. Mediante esta respiración el diafragma empuja nuestros órganos hasta la parte inferior de la cavidad abdominal, proyectando el ombligo hacia fuera y relajando completamente los músculos abdominales por lo que deja la parte baja de la espalda (zona lumbar) sin protección durante el ejercicio. Este tipo de respiración es el más recomendado para nuestro día a día.
Respiración latera o torácica. Es la que vamos a utilizar durante la práctica de pilates. Para ello en la inspiración vamos a mantener activos los músculos del suelo pélvico y el transverso, y vamos a dar atención especial a expandir la caja torácica lateral, anterior y posteriormente, notando como se abren las costillas y permitiendo la entrada de aire a la parte baja y media de los pulmones. Es decir, usamos la respiración en tres dimensiones en la parte inferior de la caja torácica, imaginando como si infláramos un flotador que nos rodea toda esta zona. De la misma manera al espirar vamos a notar como se cierran las costillas y desciende nuestra caja torácica a medida que soltamos el aire.
POR QUÉ LA RESPIRACIÓN LATERAL
Al respirar en esta región, los lóbulos inferiores de los pulmones, nos permite un intercambio de gas más eficaz.
Este patrón respiratorio favorece el empleo de los estabilizadores profundos del tronco y del uso simultáneo del suelo pélvico, multífidos y el transverso, lo que nos va a proporcionar una mayor estabilidad en la pelvis y en la columna lumbar, al ser los principales músculos estabilizadores de la región lumbopélvica junto con el diafragma.
Este patrón respiratorio también va a favorecer el empleo de los músculos oblicuos.
Todo esto nos va a ayudar a mantener una correcta alineación corporal y estabilización de nuestra zona escapular, evitando tensiones tanto en el cuello como en la espalda como ya he comentado.
OTROS ASPECTOS A CONOCER
Anatómicamente durante la espiración la caja torácica se cierra hacia dentro y hacia abajo mientras que la columna se flexiona ligeramente. Por esta razón se recomienda una espiración para favorecer la flexión de la columna
A la inversa durante la inspiración la caja torácica se abre hacia fuera y hacia arriba a medida que se extiende la columna y por este motivo se recomienda una inspiración para favorecer la extensión de la columna. Sin embargo, y sobre todo en el nivel básico se sugiere una espiración durante la extensión de la columna para ayudar a mantener el transverso activado y proteger la columna lumbar
Respirar al tiempo que nos movemos para algunas personas no es tarea sencilla, pero cuando a base de práctica, lo consiguen, les ocurre que descubren nuevas sensaciones estupendas.
Otros tipos de respiración pueden ser útiles cuando se practican otras actividades, como es el caso de la respiración diafragmática o abdominal. La toma de conciencia de los patrones respiratorios  facilita la adaptación a cualquier tipo de entrenamiento
A TENER EN CUENTA:
-La respiración ha de ser lenta y fluida
-Inhalamos (tomamos aire) por la nariz
-Exhalamos (soltamos aire) por la boca
-Mantener la lengua apoyada sobre el paladar inferior nos ayudará en la activación del suelo pélvico y el transverso a medida que soltamos el aire. También mantener la boca y los dientes entreabiertos.
-El aire le debemos de soltar lentamente. Al hacerlo imagina que tienes una vela encendida delante y que puedes mover la llama sin llegar a apagarla
LO QUE NUNCA DEBES DE HACER
-Aguantar la respiración mientras realizas un ejercicio
-Nunca te quedes sin aire o trabajes en apnea (manteniendo la respiración). No debes cortar la respiración mientras realizas los ejercicios y mantienes la tensión de los músculos implicados.
-Permitir que al inspirar se proyecte el ombligo o el pecho hacia fuera
-Permitir que al inspirar los hombros se suban hacia las orejas
SIGUE ESTOS PASOS DURANTE LA PRÁCTICA DE PILATES
Primero prepárate, realiza una inspiración y a continuación una espiración activando primero el suelo pélvico y el transverso a continuación. Debes de mantener esta contracción (al 50%) durante todo el ejercicio, haciendo un mayor hincapié en la fase de la espiración. Una vez que hayas cogido práctica te saltarás esta fase preparatoria y comenzarás a realizar los ejercicios como explico a continuación:
En la posición de inicio inhala (toma aire) por la nariz, manteniendo contraído el suelo pélvico y el transverso. Para ello expande la caja torácica como un flotador. (Abrimos costillas)
A continuación exhalas (sueltas el aire) por la boca, centrándote primero en mantener activo el suelo pélvico y transverso después, y realizas el movimiento a medida que sueltas el aire.
En la siguiente inspiración ya dependiendo de cada ejercicio bien mantendrás la posición estáticamente o realizarás otro movimiento, …
EJERCICIOS PARA APRENDER EL PRINCIPIO DE LA RESPIRACIÓN
EJERCICIO 1. Empieza tumbado boca arriba con los brazos relajados a los lados y las rodillas flexionadas.
INSPIRA. Respira por la nariz, expandiendo la caja torácica lateralmente
ESPIRA. Espira por la boca, concéntrate primero en la contracción de las fibras profundas del suelo pélvico y del transverso abdominal después. A medida que espiras más profundamente puede que sientas la contracción de los oblicuos para ayudar a empujar el aire hacia fuera
INSPIRA. Respira por la nariz, manteniendo la contracción de los músculos abdominales, y sintiendo la expansión lateral de la caja torácica
ESPIRA. Espira por la boca, concéntrate primero en la contracción de las fibras profundas del suelo pélvico y del transverso abdominal después. A medida que espiras más profundamente puede que sientas la contracción de los oblicuos para ayudar a empujar el aire hacia fuera
Completa varias repeticiones
Durante todo el ejercicio una apariencia plana del abdomen debe ocurrir como resultado de la contracción del transverso abdominal y no como resultado de flexionar la columna vertebral hacia el suelo. Esto lo podemos visualizar mejor colocando una mano sobre la parte alta de la caja torácica y otra sobre el estómago como podemos ver en la IMAGEN 1. Ambas manos se mantendrán inmóviles durante todo el ejercicio evitado su proyección hacia el techo.
IMAGEN 1

EJERCICIO 2. Empieza sentado con el peso de tu cuerpo sobre los isquiones, con la espalda recta, los brazos relajados y las rodillas flexionadas.
INSPIRA para prepararte
ESPIRA e inicia desde la cabeza y secuencialmente articula la columna en una flexión hacia delante, descansando por encima de las piernas. IMAGEN 2.
INSPIRA a través de la nariz, sintiendo como los lados y la parte de atrás de la caja torácica se expande
ESPIRA manteniendo la posición y permitiendo que se cierre la caja torácica
Completa varias repeticiones
En la última espiración, comience desde el cóccix y secuencialmente articule la columna, rodando hacia arriba a la posición inicial. Esta posición favorece la respiración hacia los lados y la cara posterior de la caja torácica
IMAGEN 2

EJERCICIO 3. Empieza sentado con las piernas cruzadas (posición de sastre) sobre los isquiones (pelvis en posición neutra) y coloca las manos sobre la caja torácica
INSPIRA y nota como se expande lateralmente la caja torácica a la vez que se separan las manos. (IMAGEN 3)
ESPIRA y siente como se desinfla la caja torácica a la vez que se cierran las costillas y las manos manteniendo activado el suelo pélvico y el transverso. (IMAGEN 4).
Completa varias repeticiones.
IMAGEN 3: Apertura de costillas
IMAGEN 4.: Cierre de costillas
Este ejercicio también le puedes practicar con una banda elástica rodeando la parte baja de la caja torácica, (IMAGEN 5), sintiendo como la banda se tensa al inspirar y se afloja al espirar.
IMAGEN 5

domingo, 11 de septiembre de 2016

LOS 5 PRINCIPIOS BÁSICOS DE STOTT PILATES

La enseñanza de pilates ha evolucionado con los tiempos dando lugar a la creación de distintas escuelas, entre las que se encuentran Polestar, Winsor Pilates, Pilates Original, Stott Pilates y Body Control entre otras. Stott Pilates fue fundada en Canadá en la década de los 80 de la mano de Moira Stott, que fue una de las alumnas de Romana Kryzanowska (alumna directa de J. H. Pilates).

Stott Pilates ha establecido 5 principios básicos de estabilización que se deben de mantener durante toda la sesión y que hacen referencia a una serie de puntos de conciencia biomecánica del cuerpo que proporcionan la técnica correcta para la ejecución de los distintos ejercicios.
Estos 5 principios no deben de entenderse de forma aislada, ya que todos trabajan juntos para crear un ejercicio inteligente y por lo tanto seguro y eficaz.
La toma de conciencia de estos principios desde el inicio de la práctica de pilates, te ayudará a adquirir un mayor conocimiento de cómo funciona tu cuerpo. Esto a su vez realzará tu nivel de capacidad y concienciación permitiéndote realizar los ejercicios con mayor precisión y control y de esa manera poder cosechar todos los beneficios que nos puede aportar su práctica.
En posteriores entradas analizaremos cada principio por separado, acompañado de la descripción práctica de los distintos ejercicios que nos va a ayudar a comprenderlos e interiorizarlos.

miércoles, 7 de septiembre de 2016

QUIÉN PUEDE PRACTICAR PILATES

El método pilates esta pensado para adaptarse a cualquier nivel de forma, por lo que la edad y tu estado de forma física inicial no importan para su práctica. Además el método a través de sus modificaciones para cada ejercicio, permite adaptar el programa para tu estado físico o necesidades concretas. Recordar, que se trata de un sistema correctivo de ejercicios en el que se progresa por etapas y en el que por lo tanto nunca debemos de superar los límites que pongan en riesgo la alineación y estabilidad de nuestras diferentes articulaciones, dando más importancia a la activación de la musculatura concreta para cada ejercicio que a la amplitud del movimiento en sí.
No obstante, es muy importante tener en cuenta que si padeces alguna enfermedad, te has sometido recientemente a una intervención quirúrgica u otro tratamiento médico, sufres algún tipo de lesión o minusvalía o si estas embaraza o has dado a luz recientemente antes de empezar a practicar el método pilates debes de consultar a tu médico o especialista. En la actualidad muchos son los médicos que aconsejan la práctica de pilates, por ejemplo para los dolores de espalda.
J. H. Pilates, practicando "mecedora con piernas abiertas" a edad avanzada
Durante la práctica no debes de experimentar dolor ni molestia alguna. Sin embargo no debes de confundir el dolor con la sensación de esfuerzo o ligero estiramiento.
A pesar de ser un método de trabajo muy adaptable para todo tipo de personas, su práctica puede resultar exigente y poner a prueba al cuerpo más “en forma”. Recuerda que en pilates trabajamos más la musculatura profunda y estabilizadora, que suele ser la menos entrenada incluso para personas con un buen estado físico inicial.
Pilates también se puede practicar como complemento a otras actividades deportivas como el running, ciclismo, golf, tenis, pádel y cualquier otra disciplina que nos exige un esfuerzo muy localizado sobre ciertos músculos y articulaciones o bien de una manera asimétrica (mayor énfasis en el trabajos de unos de nuestros lados) ayudándonos a corregir esos desequilibrios musculares y a trabajar el cuerpo y la musculatura de forma integral y simétrica.
También es muy recomendado para personas que lleven una vida sedentaria o que en su trabajo mantengan posturas forzadas/mantenidas o movimientos repetitivos a lo largo de su jornada laboral.

sábado, 3 de septiembre de 2016

EQUIPAMIENTO NECESARIO PARA LA PRÁCTICA DE PILATES

Para el comienzo de la práctica de pilates matwork (colchoneta o suelo) se necesita un equipamiento muy sencillo que describiremos en esta entrada. A medidas que vayas progresando, tienes distintos accesorios que siendo bastante asequibles en precio, nos aportan variedad a la sesión e intensifican el trabajo.
El tiempo aconsejable a dedicar a la práctica de pilates está entre 120 y 150 minutos a la semana, que lo puedes repartir entre 2 y 4 clases, todo en función del tiempo del que dispongas, evitando siempre las interrupciones en medio de tu sesión y las comidas fuertes al menos 1 hora y media antes de la misma.
Clase de mat o colchoneta de J. H. Pilates
LO QUE NECESITAS:

-COLCHONETA. Esta deberá se lo bastante gruesa como para proteger tu espalda y articulaciones mientras practicas los sucesivos ejercicios. Un grosor de 10 mm te proporcionará un nivel adecuado de protección, ya que si es demasiado gruesa te dificultará el equilibrio. La longitud de la misma será al menos igual que tu estatura. A tener en cuenta que la colchoneta no deslice sobre el suelo, por lo que una de sus caras será antideslizante.
-ROPA CÓMODA. Usa ropa que te permita moverte con libertad y no obstaculice tus movimientos. Es indiferente que la ropa sea o no ceñida (tipo malla deportiva), si bien el uso de ropa ceñida te permite observar mejor tu cuerpo, alineación y movimiento, ayuda muy importante para realizar las oportunas correcciones.
-CALCETINES. La práctica de pilates resulta más fácil sin ningún tipo de calzado, lo que nos permite trabajar mejor los músculos intrínsecos del pie y nos da una mayor propiocepción, por lo que es recomendable realizarlo sin nada en los pies o con unos calcetines normales o en su defecto unas zapatillas de ballets. Cuando vayas a realizar pilates con fitball (pelota grande), es interesante el uso de calcetines antideslizantes o realizarlo sin calcetines, lo que nos dará un mayor grado de adherencia a la pelota.
-TOALLA PEQUEÑA. Si al tumbarte sobre la espalda la cabeza queda demasiado inclinada hacia atrás usa una toalla debajo de la nuca, ganando en comodidad y seguridad para tu cuello.
-ESPEJO. Este no es un elemento necesario, si bien su uso nos permite observar nuestro cuerpo y alineación, siendo de gran ayuda para corregirnos a nosotros mismos.

Y por último, necesitarás MOTIVACIÓN y CONSTANCIA, ingredientes fundamentales para sacar el mayor provecho a tus sesiones.

jueves, 1 de septiembre de 2016

LOS 6 PRINCIPIOS BÁSICOS DEL MÉTODO PILATES

Los ejercicios del método pilates se deben de realizar siguiendo unos principios básicos que su propio creador estableció. No debemos de olvidar que todos los movimientos que realizamos están pensados para reducir el riesgo de lesiones y asegurar la eficacia de los ejercicios.
La incorporación de estos principios básicos es un proceso lento donde la paciencia y  la constancia son fundamentales para ello. No debemos desanimarnos durante las primeras sesiones al querer incorporarlos  todos. La práctica es el mejor método de aprendizaje.
Los principios establecidos por J. H. Pilates son 6 y son los siguientes:

CONCENTRACIÓN: Es clave para conseguir conectar la mente y el cuerpo. Para trabajar el cuerpo debes de estar preparado mentalmente, ya que es la mente la que guía al cuerpo y la que pone le pone en acción, prestando atención en los movimientos que realizas mediante la adecuada respuesta muscular. Cuando te concentres en un área que estás trabajando, procura sentir la actividad que está desarrollándose. Eses es el poder de tu mente. ¡Úsalo¡

CONTROL: J. H. Pilates diseñó su método en torno a la idea del control muscular, evitando en todo momento movimientos bruscos, causales e irregulares con el objeto de evitar lesiones. Al realizar los ejercicios meticulosamente y con control, concentrará su esfuerzo, obtendrá más beneficios del movimiento y avanzará adecuadamente, evitando que sean los hábitos adquiridos los que controlen el movimiento.
CENTRALIZACIÓN: Piensa en los músculos que utilizas para desempeñar tus quehaceres diarios, y verás que son los brazos y las piernas, pero y ¿qué hay del centro del cuerpo? No te olvides del él. Este centro es definido como el cinturón (anterior y posterior) que se extiende desde la base de las costillas hasta por debajo de la pelvis y en él se hallan los grupos musculares situados en el abdomen, nalgas, cara interior de los muslos y región lumbar y que constituyen tu centro de energía o mansión de  poder como lo bautizó J. H. Pilates. Un centro fuerte es fundamental durante la realización de todos los ejercicios, siendo el punto de apoyo para ejercer el control de todos los movimientos, incluso cuando aparentemente sólo estés usando las extremidades del cuerpo. El centro soporta el tronco, ayuda a mejorar la postura, facilita movimientos equilibrados y afina el control motor de las extremidades. Cada movimiento utiliza estos músculos y si quieres realizar los ejercicios con control, necesitas concentrarte en esta área.
FLUIDEZ: Durante la práctica es clave realizar los ejercicios con fluidez, sin movimientos forzados e incómodos, debiendo de resultar su ejecución grácil, con la sensación vista desde fuera de que no cuesta. A medida que avanzas, aprenderás a enlazar cada ejercicio con el siguiente, sin pausas. Al empezar habrá veces que necesitarás descansar entre un ejercicio y el siguiente. Los movimientos seguirán el fluir natural del cuerpo, sin un ritmo muy rápido o muy lento.
PRECISIÓN: Cada movimiento tiene un propósito, una razón de ser y cada instrucción es vital para el éxito global del ejercicio. Para obtener buenos resultados de los ejercicios es necesario dedicarles tiempo y concentrarse en realizar esos movimientos con precisión y control, evitando las acciones semiconscientes. Con el tiempo y paciencia, tu precisión mejorará y te beneficiarás del esfuerzo dedicado.
RESPIRACIÓN: Respira es el primer y último acto de la vida. Al inspirar y espirar profundamente la sangre se llena de oxígeno y elimina toxinas. El ritmo de la respiración es muy importante en el método Pilates, y los ejercicios están diseñados para coordinarse con una respiración profunda y eficaz. A la vez una buena respiración te ayudará a controlar tus movimientos. Por regla general se inhalará por la nariz al preparase para realizar un movimiento y se exhalará por la boca mientras se ejecuta. (No obstante sobre esté principio realizaré una entrada desarrollando la metodología a emplear en la respiración y su correspondencia con las diferentes pasos de cada ejercicio). 

¿QUÉ BENEFICIOS NOS PUEDE APORTAR PILATES?

Los beneficios que podemos obtener con la práctica del Método Pilates son muchos y variados y han sido refrendados por especialistas médicos y fisioterapeutas; sin embargo, no hay que ver en la práctica de este método un milagro escultor del cuerpo, ni un sistema que combate la celulitis o que moldea los cuerpos hasta hacer de ellos esbeltos espejos del modelo de belleza actual. Ese no es su objetivo.
Los resultados en el cuerpo comienzan a notarse a las pocas semanas de comenzar con los ejercicios de Pilates. Como es una actividad anaeróbica, no se trabaja a nivel cardio respiratorio ni son ejercicios de resistencia (como son el spinning o el aeróbic), por lo tanto no se busca la quema de calorías y grasas como en estas disciplinas. Buscamos el fortalecimiento muscular (principalmente de los músculos estabilizadores) y la alineación postural. Por eso es conveniente tener bien claro cuáles son nuestros objetivos, a la hora de elegir el tipo de ejercicios que vamos a realizar.
Pilates sirve para oxigenar los músculos mediante la respiración y lograr que la persona tome mayor conciencia de su cuerpo y sus articulaciones. Es una práctica que relaja y fortalece cuerpo y mente, pero como todo lo relacionado con la salud, ha de ser contemplado como un método que requiere seriedad y compromiso por parte de la persona que lo práctica, siendo la constancia la principal premisa para disfrutar de los beneficios que nos puede aportar su práctica.

Algunos de los principales beneficios que conlleva la práctica regular de Pilates son:
- Logra un estado de relajación global (mediante la respiración y la concentración), permitiendo con ello eliminar el estrés, las tensiones musculares y la rigidez.
- Aumenta la flexibilidad, la agilidad, el sentido de equilibrio, y mejora la coordinación de movimientos.
- Es el complemento ideal para practicar otro deporte, te ayudará a prevenir lesiones, trabajaras los músculos posturales, esos a los que nadie les presta atención y son claves para tener una buena técnica de carrera, por ejemplo.
- Provee un buen tono muscular, fortaleciendo y tonificando el cuerpo sin aumentar el volumen de los músculos, consiguiendo así estilizar la figura.
- Nos ayuda a aplanar el abdomen mediante la activación del transverso, nuestra faja natural
- Aporta gran vitalidad y fuerza.
- Mejora la alineación de la columna vertebral, y corrige los hábitos posturales incorrectos.
- Mediante la integración cuerpo-mente, consigue aumentar la autoestima y el conocimiento del propio cuerpo.
- Permite prevenir lesiones del sistema músculo-esquelético.
- Ayuda a aliviar la mayoría de los dolores de espalda.
- Mejora la movilidad de las articulaciones.

¿QUÉ ES PILATES?

Un buen estado físico es el primer requisito para ser feliz”. Esta frase de J. H. Pilates podría resumir perfectamente la filosofía del método creado por él. Un buen estado físico que se consigue haciendo que intervengan cuerpo, mente y espíritu.
El pilates como se conoce en la actualidad es un sistema de acondicionamiento físico sin impacto que hace un mayor énfasis en la alineación corporal, en la respiración y en agudizar la conciencia de las posibilidades y recursos no explotados del propio cuerpo, cuyo objetivo es el fortalecimiento muscular y al mismo tiempo la mejora de la flexibilidad, beneficiando la eficacia de la motricidad.
El método se practica mediante la ejecución de una secuencia de ejercicios que se realizan con movimientos controlados y precisos, desarrollada en su origen por J. H. Pilares hace ya casi 100 años, y actualizada a los nuevos conocimientos que biomecánicos y médicos tienen en el campo del movimiento y la anatomía humana.
Los ejercicios se realizan en distintas posiciones (acostados en posición supina o prono, sentados, de rodillas, inclinados, en cuadrupedia y de pie), evitando siempre el impacto o presión sobre músculos, articulaciones y tejidos.
Las personas que practican este método con regularidad desarrollan el cuerpo de una forma armónica, vigorizan la mente, mejoran su postura, se mueven con mayor desenvoltura, duermen mejor y consiguen un cuerpo más fuerte, flexible y una figura más estilizada, siendo un método que no fatiga ni aburre y que debe practicarse atendiendo una serie de principios que desarrollaré en posteriores entradas.
En la ejecución de los ejercicios la persona debe enfocar su concentración en sentir e identificar lo que el cuerpo hace en cada movimiento, en controlar a conciencia los músculos que actúan siendo esto la conciencia corporal y el manejo de la propiocepción. Es la mente la que guía el cuerpo. J. H. Pilates creía en el poder de la mente para controlar el cuerpo, por lo que no es extraño que muchas personas queden muy sorprendidas ante el bienestar y la energía que sienten tras las primeras clases.
Los ejercicios del método despiertan la conciencia del propio cuerpo. Buscan trabajar el cuerpo desde el centro hacia fuera, convirtiendo la musculatura abdominal, la región lumbar o parte baja de la espalda y la pelvis en una potente central de energía o Powerhouse como lo denominada J.H Pilates.
Durante la práctica como desarrollaremos más adelante, la respiración debe ser consciente, de tal forma que se integre y coincida con los respectivos movimientos, realizando la inhalación profunda y una exhalación completa (normalmente en la fase más fuerte de cada ejercicio).
En su origen J.H. Pilates creó una secuencia de 34 ejercicios. En la actualidad a partir de los mismos, modificaciones y variaciones existe un amplio repertorio para adaptarse a las necesidades de cada persona. La práctica es progresiva, yendo siempre de menos a más y su ejecución comprende tres niveles de dificultad: básico, intermedio y avanzado. Un mismo ejercicio puede realizase atendiendo a cualquiera de estos niveles en base a las modificaciones.
La técnica abarca 3 tipos diferentes de entrenamiento, los cuales no están aislados el uno del otro, sino que se complementan entre ellos:
-PILATES MATWORK o sobre colchoneta, en el que trabajamos utilizando exclusivamente nuestro propio peso
-PILATES CON ACCESORIOS: pelotas de tonificación, gomas, círculo mágico, fitball, foam roller, arc barrel, etc. Igual que en colchoneta, con la diferencia de que el uso de estos accesorios nos permiten trabajar desde distintas posiciones, planos e intensidades, siendo un complemente perfecto para enriquecer nuestras sesiones.

-PILATES CON APARATOS: cadillac, barril grande, silla baja o alta y reformer, siendo este último el más popular.